EE.UU. contribuye a reducir la contaminación del agua en Centroamérica
USAID y EPA cumplen con acuerdo de libre comercio con América Central
14 noviembre 2008
By Nancy L. Pontius
Special Correspondent
Planta de tratamiento de agua operada por la Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillado de El Salvador.
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Littleton (Colorado) – Ayudar a limpiar el Lago Managua y el Lago Nicaragua era el objetivo del equipo de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de EE.UU., que viajó Nicaragua en julio a petición del presidente de ese país, Daniel Ortega.
“Las aguas residuales, los desechos agrícolas y la escorrentía entran directamente en estos lagos, lo cual es un problema común en otras zonas de América Central, así como en el mundo en desarrollo”, dijo a America.gov Al Korgi, coordinador de actividades internacionales de la EPA en la Región 4.
La asistencia de la EPA, financiada por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), complementa otros proyectos en el marco del Acuerdo de Libre Comercio EE.UU.-América Central-República Dominicana (CAFTA-RD). En virtud de este pacto, la USAID y la EPA prestar asistencia técnica en cinco países de América Central: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua, así como en la República Dominicana.
“Los compromisos ambientales del CAFTA-RD se cumplen con el apoyo de Estados Unidos a través del acuerdo entre la USAID y la Comisión Centroamericana de Medio Ambiente y Desarrollo”, dijo a America.gov Rubén Alemán, especialista ambiental de la USAID.
El programa de USAID en América Central y Mexico ayuda a la región a cumplir con los compromisos ambientales del CAFTA-RD, a reducir las amenazas a la biodiversidad, y a sentar las bases de un proceso viable de desarrollo del medio ambiente, explicó Alemán.
Uno de los elementos del programa de USAID es el proyecto de gestión de aguas residuales, que:
• Ayuda a los países a establecer y fortalecer sus normas de contaminación con respecto a las aguas residuales.
• Ayuda a los laboratorios de agua y aguas residuales a alcanzar la acreditación internacional que garantiza la calidad de los datos (y a obtener resultados que se puedan defender en los tribunales).
• Elabora materiales de capacitación de operarios para futura plantas de tratamiento de aguas residuales. Estas plantas utilizarán tratamientos biológicos que sean sostenibles y adecuados para el clima tropical, dijo Alemán.
Cada país del CAFTA-RD tiene objetivos para aumentar la cantidad de aguas residuales nacionales que serán sometidas a tratamiento para el año 2015, dijo Alemán. Por ejemplo, El Salvador actualmente trata cerca del 3 por ciento de sus aguas residuales, y tiene previsto aumentar esa cifra al 49 por ciento durante los próximos siete años.
Según Korgi, de la EPA, estos países colaboran con Estados Unidos para mejorar sus prácticas ambientales. “En la actualidad, una porción significativa de los vertidos industriales que van a parar a masas de agua no están sometidos a vigilancia ni a normativas”, dijo.
Además, “en toda la región, la eliminación de desechos sólidos y la gestión es generalmente un problema”, dijo. “Sin embargo, varias ciudades están haciendo esfuerzos significativos para disponer de instalaciones de eliminación de desechos sólidos”.
Con las lluvias torrenciales, la erosión del suelo es también una preocupación. Las malas prácticas de gestión del suelo, como por ejemplo la deforestación, pueden dar lugar a deslizamientos de tierra en zonas con poca vegetación, dijo Korgi. El suelo erosionado transporta fertilizantes y plaguicidas a masas de agua, así como los contaminantes de residuos sólidos municipales e industriales depositados en vertederos a cielo abierto.
“Los organismos encargados del medio ambiente en el CAFTA-RD han pedido ayuda para hacer frente a estos difíciles problemas de contaminación”, dijo Korgi.
Un operario verifica la calidad del agua en una planta de tratamiento de aguas residuales en El Salvador.
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REGLAMENTACIÓN CENTROAMERICANA MODELO PARA EL TRATAMIENTO DE AGUAS RESIDUALES
La EPA está ayudando a los países a fortalecer los requisitos de control de contaminación de las aguas residuales a través de una iniciativa de seis años para llevar a la práctica el Reglamentación Centroamericana Modelo para el Tratamiento de Aguas Residuales.
La existencia de una normativa uniforme con respecto a la contaminación de aguas residuales en América Central, nivelará el terreno de juego económico para todas las empresas e inversores de América Central, dijo Korgi, además de ayudar a proteger el medio ambiente.
La aplicación de la reglamentación modelo entraña crear un programa de reglamentación sobre la base de la propuesta, pero con modificaciones que se adapten de manera realista las necesidades de estos países, dijo.
Para controlar la contaminación del agua, la EPA recomienda que los países:
- determinen todas las entidades que actualmente vierten residuos a masas de agua y, a continuación, que vigilen lo que vierten;
- mejoren la capacidad de laboratorio para probar los vertidos y la calidad del agua y obtener resultados jurídicamente admisibles como prueba;
- establezcan un programa de permisos para controlar los vertidos;
- creen una infraestructura de cumplimiento para hacer valer estos permisos;
- aumenten la participación del público, y
- mejoren la gestión de las cuencas hidrográficas, como por ejemplo la reducción de la escorrentía agrícola plantando vegetación que actúe como zonas de amortiguación absorbente antes de que la escorrentía alcance un lago.
Emprender todas esas medidas es un objetivo ambicioso, Korgi dijo. Aunque los países han dicho que este programa es exactamente lo que necesitan y que están avanzando, tendrá que pasar algún tiempo hasta que se consolide esta estructura de control reglamentario.
Agregó que se deben superar las dificultades, entre estas la falta de comunicación, la duplicación de responsabilidades entre los distintos organismos del gobierno, y la escasez de personal y recursos.
NICARAGUA
Tom McCully, asesor principal de la EPA sobre asuntos internacionales de agua, dijo a America.gov que como parte de las recomendaciones del organismo para la gestión de las cuencas hidrográficas, en Nicaragua la EPA aportó sugerencias para gestionar la superposición de competencias de los distintos organismos del gobierno de ese país.
El Lago Nicaragua, el mayor lago de agua dulce en América Central, es un elemento importante de la economía del país, un aspecto que incluye planes para la explotación y exportación de pescado a Estados Unidos, dijo Korgi.
“Los nicaragüenses quieren asegurarse de que todo el pescado que se exporte cumpla con las normas del USDA, y que la piscifactorías cumpla también con las normas ambientales nacionales”, dijo. “Sin embargo, el aumento de la contaminación del agua que se ha observado en el lago de Nicaragua podría obstaculizar este plan”.
El uso del Lago Nicaragua como fuente de agua potable es otro motivo para seguir avanzando en la limpieza del lago. Lamentablemente, el crecimiento de la población, el comercio y la agricultura por lo general aumentan la posible contaminación del agua, dijo Korgi, lo cual que incrementa la necesidad de controles reglamentarios.
“La participación continua de los organismos nacionales de salud y medio ambiente, el sector privado y otras partes interesadas es fundamental en el desarrollo de un enfoque coherente y sostenible para la gestión de las aguas residuales”, puntualizó Alemán.
Fuente: http://www.america.gov/st/env-spanish/2008/November/20081114153536emanym0.6506769.html |